En los campamentos, circula persistentemente lo que es más que simple rumor de que las ordenes de Argel imponen una movilización contra el Movimiento de los Saharauis para la Paz y todo aquél que busque una solución al “problema” que ha creado.
De tal modo los enemigos del Polisario y de su mentor argelino van superando a los amigos y aliados.
Hoy por hoy, la prioridad es la lucha contra la paz y sus precursores. De repente enemigo N°1, el MSP se ve blanco y diana de una campaña de prensa con evidentes e inconfundibles huellas de la inteligencia militar argelina.
Se trata, según fuentes concordantes en Tinduf, de desprestigiar al MSP que va ganando vertiginosamente terreno a fin de zancadillear toda tentativa de solución al “problema” del Sahara.
Incluso dentro de la nomenclatura polisarista parece que la “recreación” ha terminado. Hasta los que solían justificar cierta apertura han recibido ordenes de no decir esta lengua es mía.
En Tinduf ahora la guerra es contra la paz y los que la promueven. Otra batalla perdida de antemano a pesar del jugoso presupuesto dedicado por la junta militar argelina a esta nueva locura.
En Argel, no obstante, los hay que creen que nada es suficiente para imponer la impostura, ni los presupuestos, ni remodelaciones ministeriales ni compra de conciencia.
La verdad es una e indivisible
